domingo, 24 de marzo de 2019

MÓNICA ALEJANDRA SCALDAFERRO (San Nicolás – Buenos Aires)


V
Tengo la sed de los siglos esperando.
Los huecos
que son mi propio infierno.
Esa parte de río que me falta.

Algo obsesivo
hay
en su identidad de peces.
Nada que decir
desde este margen.
Sé que los hijos reclamarán
la antigüedad del alma, todos
los tiempos juntos, todos
los hombres al pie de la memoria.
Qué dolor
se complace en un solo cuerpo.

X
Decir. Caminar. Partir.
Regresar hasta algo. Odiar. Llorar.
Buscarse. Desesperar. Amar.
Esperar. Impacientarse.
Tomar la mano. Acariciar. Arremeter.
Despertar. Correr. Eructar.
Escupir al cielo. Recibir la lluvia.
Escarbar la tierra. Atragantarse de aire.
Seguir un pájaro. Ahogarse en cada charco.
Amontonar, cuestionar, despreciar,
volcar, penetrar, invadir,
permitir la entrada, errar la puerta,
parir, crecer, volver al polvo,
seguir amontonando,
romperlo todo
pero dejar todo
por si arremete la nostalgia.

Tengo un puñal en la boca.
Puedo matarme con las palabras
como también
suicidarme sin ellas.

Este silencio proscribe
y las sombras no acompañan.
Cada hora es una fruta
y la como.

Ahí tu cauce
perdiéndose en mis orejas.
Ahí tu cauce
discurriendo en las islas de mi cuerpo.
Ahí tu cauce
apoderado absoluto de mis peces.

Estamos confundiendo los pájaros
con aviones en el cielo.
En el reverso del día
no encontramos estrellas.
Estoy segura que hoy
alguien o algunos mueran.
Antes de que el sol cierre toda posibilidad de luz
y le demos la espalda
es probable que necesite respiración artificial
para mantener vivos
los escasos contactos con la piel.

¿Hasta dónde tu amor?
¿Hasta dónde tu entrega?

Piel
delgada prenda  que cobija esta osamenta
hasta que el mediodía serene sus  pasos
en la oscura memoria.

No será eterna mi carne
ni durará por siempre mi nombre.

Mi voz
hoy planta bandera
y se rinde
sin más convencimiento.

                                   Quiero irme con los pájaros.

Ninguna brújula
entre el día y la negritud
hará que tropieces conmigo.

Mi nombre
está callado en las guías telefónicas.

No hay palabra situándome en el diccionario
ni acepciones que fijen mi presencia.

Dejé mi corazón
                         al margen del camino
solo para que alguien me encuentre.


Un afiebrado Pacífico
define los huracanes
          la sequía
          las inundaciones.
Un afiebrado Pacífico
                                se entrega
a la cadencia planetaria de los vientos del Este.
Las ardientes aguas
de ese afiebrado océano
quizás incendien Australia
y ante tanta deserción de peces
quiero morir en tu ecuador
cálido
letal
oceánico.


Fragilidades
                                                 Campo arrasado es la nostalgia
La memoria en harapos guarda monedas
comprará los días por venir
Cantemos un poco
no más
para desabrazar las palabras o dejarlas a todas
enjauladas en un poema.
Bienaventurados los muertos no olvidados porque de ellos
será el reino de los buenos y los malos recuerdos
De ellos el reino de las mariposas
más allá de las cruces del campo santo
Bienaventurados los nombres mezclados de los muertos
Porque así morimos
en la confusión y la sorpresa
fugitivos
sin espejos que detengan la memoria
Bienaventurados los muertos sin nombre
sin mortajas
solo un destino cumplido
Porque así morimos
ateridos / huérfanos / amarillos
tropezando con las huellas de los pasos dados
componiendo
un dominó sin coincidencias
Porque así vivimos
como un poema que no late 
despidiéndonos siempre
por si perdemos el juego.

MÓNICA ALEJANDRA SCALDAFERRO (San Nicolás – Buenos Aires) nació en inriville (córdoba) en 1966 y vive en san Nicolás desde 1986. Poeta y narradora. Profesora de enseñanza primaria. Profesora de historia. Licenciada en calidad de gestión de la educación. Capacitadora de docentes en el área de ciencias sociales y formadora de directivos de establecimientos educativos de la provincia de buenos aires. Participó de distintas antologías literarias editadas en la ciudad y otras provincias de argentina. Obtuvo premios tanto en su faz lírica como narrativa. Coordinó diferentes talleres literarios en estamentos barriales. Fue miembro del taller de expresión poética dependiente de la escuela municipal de lengua y literatura “Andrés del pozo”, participando en todos los libros colectivos que editó dicha entidad: “Al filo de los nombres” (1992); “Perfiles del fuego” (1993), “Tierras en el viento” (1994) y “Ángeles de sobremesa” (1997). Participó del disco compacto “Poetas de San Nicolás: voces de un nuevo milenio” (yaguarón ediciones, 2000). Fue jurado en diferentes certámenes literarios a nivel local, provincial y nacional. Obtuvo el reconocimiento mujeres que honran por su actividad cultural y educativa. Ha presentado libros de poesía de numerosos escritores, como así también ha organizado y participado de distintos encuentros literarios, recitales, ferias del libro, y ciclos dedicados a este rubro artístico, en estos últimos 30 años. Es miembro de la comisión directiva de la Asociación de Escritores Nicoleños (AEN). participó, representando a su ciudad, en el VI festival internacional de poesía “San Nicolás de los arroyos”, 2016; y como poeta representante de argentina, en el Festival Internacional de Poesía Abbapalabra, realizado en los estados de México y San Luis Potosí, México, 2015 y 2016. Participó en el recital internacional de poesía, quito ecuador, 2017. Ha publicado los siguientes libros  Puertas de arena” 1999, Babel, 2016,  colección Editorial Velarde, en Cuadernos Amerhispanos, de México.